miércoles, 21 de octubre de 2009

Mitos y verdades en la alimentación de los niños



Sin duda que la alimentación es un tema muy sensible al rumor y al mito. Es algo que nos afecta a todos y donde cada familia tiene sus propias creencias, muchas de ellas basadas solamente en la experiencia. Karen Cruz, nutricionista de la U. Andrés Bello, aclara esas creencias en relación a la alimentación infantil.
La alimentación normal de un niño es uno de los aspectos centrales en la nutrición del ser humano. Los importantes cambios en los estilos de vida y la alimentación en el último tiempo, se deben tanto a cambios socioeconómicos como a modificaciones en el medio familiar y ambiental. Karen Cruz Amengual, docente de la Escuela de Nutrición y Dietética de la U. Andrés Bello, devela algunos mitos sobre la alimentación infantil, que ayudará a aclarar aquellas ideas erróneas en la relación entre los alimentos y los niños. En Lactantes menores:- Incorporación de rellenos cuando el niño llora: “Esto es un error, ya que el niño no sólo llora cuando tiene hambre. Son muchos los motivos por los cuales puede expresarse de esta forma, se debe confirmar el motivo. Siempre se tiene que optar por la lactancia materna y si esta es insuficiente (a causa de una alteración o trastorno materno), en última opción se debe incorporar, luego de una prescripción medica, el relleno”, explica la nutricionista. “Es importante recordar que si se da un relleno, éste reducirá la frecuencia de las tomas y, por lo tanto, la estimulación y producción de leche materna, siendo esta última el alimento más adecuado para la nutrición en el primer año de vida y, en forma exclusiva, en los primeros seis meses”, agrega. - Incorporación de agua ante de los seis meses: “La incorporación de aguas de distintos tipos, ya sea por que se cree que el niño tiene sed o para evitar los cólicos es un error, ya que la leche materna contiene todos los nutrientes necesarios que el niño requiere hasta el primer año de vida. La leche materna cubre sus requerimientos hídricos y nutritivos”, explica la profesional. - Traspaso de sabor de algunos alimentos a través de la leche materna: “Esto varía de una madre a otra. No es necesario modificar la dieta de la madre, a excepción que el lactante presente alguna alergia. Es importante que los alimentos sean los adecuados y así proporcionen los nutrientes necesarios para que la fabricación de la leche sea suficiente. Se deben considerar algunos productos como el café, chocolate, mate y té cargado que pueden producir intranquilidad y nerviosismo en la madre y al niño, puesto que contienen sustancia estimulantes”, continúa. Lactantes mayores:- Las papillas alimentan más que la leche: “A una gran cantidad de madres le dicen que ‘su leche ya no alimenta’ que ‘su leche es pura agua’ y por tal motivo prefieren sustituir una toma por la incorporación de una papilla. Sin embargo, se debe considerar que las papillas de carne y verduras contienen menos calorías que la leche. Y aunque estén preparadas con cereales, que aportan energía, éstas contienen menor cantidad de proteínas, vitaminas y minerales que la leche materna. Por tal motivo, desde los seis meses se debe complementar la alimentación con papillas y leche materna, de esta manera se logra un equilibrio en la alimentación de bebe, entregando una alimentación óptima. Recuerde que se debe complementar la alimentación, no sustituir”, dice la docente de la U. Andrés Bello. - Los colados industrializados no son nutritivos: “Los alimentos infantiles son seguros para alimentación del niño, ya que son cien por ciento naturales, no contienen preservantes, aditivos y colorantes. Están planificados para cubrir las necesidades nutricionales del niño en el tiempo de comida diseñado”, comenta. - Incorporación de sal a las papillas ya que son insípidas a nuestro paladar: “Cuando el niño comienza a probar nuevos alimentos éstos deben ser en la forma natural, ya que ellos no conocen los gustos, los adquieren con el tiempo. Además, debemos tener presente que en los niños cuando nacen todavía tiene todos sus órganos inmaduros y por consiguientes no pueden realizar todas sus funciones. Por lo tanto, al agregar sal a las comidas podemos sobre exigir la función de los riñones y dañarlos”, subraya. Preescolares y escolares:- Los niños no deben comer frutos secos (almendras, nueces, avellana, maní, pistachos): “Lo que no deben consumir son frutos secos enteros, sólo molidos o picados, ya que pueden ser causa de atragantamiento. Los frutos secos se pueden incorporar desde los 18 meses de edad, gracias a que son alimentos ricos en grasas (ácidos grasos monoinsaturados) de buena calidad, antes no debido a que son alimentos alergénicos”, destaca la nutricionista. - Se debe dar siempre un yogurt cuando toma antibióticos: “Esto es verdadero, sólo a partir de los dos años de vida, ya que estudios han demostrado que la ingesta de antibióticos altera la flora intestinal. Los yogurt son alimentos probióticos que protegen la flora intestinal y estimulan el sistema inmunológico”, advierte Karen Cruz.- El consumo de té es beneficioso: “Esta idea es totalmente errónea, ya que el consumo de té y café esta prohibida en los niños, debido a que este producto inhibe la absorción de hierro y calcio necesarios para u óptimo crecimiento”, concluye la profesional de la U. Andrés Bello.


Fuente:

La Segunda online

21/10/09



No olvides visitar

No hay comentarios:

Publicar un comentario