“Aun no estando la figura paterna, la madre lleva internamente la figura del representante de la ley, que recae en la paternidad”, afirma el Lic. Mario Torres, quien aborda el tema de la paternidad responsable, y explica la importancia de la presencia efectiva y activa del padre como tal. “En la medida que el compromiso parte desde el vamos, es casi natural que la paternidad se asuma de manera espontánea, sin que tengan que mediar necesariamente estímulos para la asunción de este rol, que básicamente está impregnado de afectos”, responde el Lic. Mario Torres, acerca de cómo ser un padre responsable. El entiende que “la paternidad es diferente a la maternidad, porque el padre va incluyéndose paulatinamente en esta función de papá. La madre lleva al bebé durante nueve meses en su vientre, que en realidad es parte de ella. La separación de la madre y el hijo en cuanto a seres diferenciados será la función paterna por excelencia. Aun no estando la figura paterna, la madre lleva internamente la figura del representante de la ley, que recae en la paternidad”. Acerca de los consejos prácticos, para que el papá sea responsable, “la fascinación y los sentimientos de ternura, que habitualmente, por cuestiones culturales, son atribuidas casi como patrimonio materno, es importante que el padre deba recrear los afectos tiernos en la humanización y crianza de este hijo. La ternura es la cualidad de varones y mujeres, pero, por cuestiones culturales muchas veces se inhibe en la crianza de los hijos, y fundamentalmente con el varón. Sin embargo, la manera de abrazar, de identificarse, se hace solamente con el fluido afectivo que emana del progenitor”, puntualiza Torres, y cita cuatro puntos fundamentales que son: Reconocimiento del bebé, atención y cuidados, acompañamiento, relacionamiento. Por siempre mamá y papáAnte una separación o divorcio, claramente debe entenderse que madre y padre lo siguen siendo para toda la vida. Toda situación de separación o divorcio –enfatiza el psicólogo– implica dolor por la pérdida de la pareja en situación de los dos juntos. “Es importante y fundamental además poner en palabras la situación de separación, la presencia y la participación contundente del padre en relación con los hijos”. Espontaneidad en los afectosSi los padres están separados, serán necesarias maneras de gerenciar eficazmente el acompañamiento, las visitas. “En la medida que prime la espontaneidad de los afectos, esta necesidad mutua de estar con los hijos, tiene una comunicación que va más allá de lo estrictamente formal. Aun estando imposibilitado el padre en llegar junto a sus hijos, es necesario que el niño se sepa amado, y desde esta posición, cada padre tendrá que buscar los medios de estar presente, y con el sentido de protección que da su figura aún en la ausencia cotidiana”. ¿Cómo pueden congeniar madre y padre acerca de la crianza del hijo o la hija? Definitivamente ello no es fácil, “pero dentro de la relación afectiva hay un aspecto inconsciente y otro consciente que guiarán el sentido a la vida que tanto el padre como la madre entregarán a sus hijos, en una relación en la que ambos prestan sus cualidades humanas, para igualmente socializar y convertir lentamente a este niño o niña en sujeto de deseo para una vida adecuada”. El padre “mayor”Acerca de si la paternidad irresponsable es una causa de la existencia de tantos niños en situación de riesgo y calle el profesional, respondió que “es muy difícil puntuar que la causante sea la irresponsabilidad paterna. En todo caso podría pensarse que la ley no protege en cuanto ‘padre mayor’ a sus hijos, y la familia es invadida por la ausencia de protección, dejando penetrar la violencia de los problemas sociales, económicos, políticos, etc. De todos modos, la falta de compromiso de la paternidad ante los hijos sí genera vacíos que pueden gravitar sobre el desarrollo de los mismos”.La paternidad es vital, aun en la ausencia de la misma. Es fundamental la inclusión de algún familiar que pueda representar y efectivizar en alguna medida esta figura (abuelos, hermanos, parientes o pareja de la madre). “El ser humano viene de la simbiosis o fusión muy fuerte con la madre, y de hecho que es prioritario y urgente que alguien asuma el rol de tercero que “separa” para desconfundir al niño de la madre. Este rol de separador y humanizador es trascendente en la vida del niño”, concluye el profesional.cmedina@abc.com.pyFotos: Néstor Soto.Modelaron Fernando y Joaquín Romero.
Fuente:
ABC Digital
05/10/09
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